4 GRAMOS DE MARIHUANA MOTIVARON UNA BATALLA CAMPAL EN LA COMISARÍA DE PUERTO TIROL
El padre y la novia de un detenido ocultaron marihana en los alimentos que pretendían entregarle pero fueron descubiertos. El hombre fue detenido y esto generó una revuelta. Hubo quema de colchones y policías heridos.
En la noche del martes, efectivos de la Comisaria de Puerto Tirol junto al Cuerpo Operaciones Especiales y Bomberos de la Policía tuvieron que controlar un motín iniciado por uno de los internos de la comisaría, luego de que los guardias detectaran que el padre de un detenido intentara pasar marihuana oculta en la comida. Cuatro policías resultaron lesionados.
Todo comenzó a las 21.30 cuando se hicieron presentes a la comisaria un hombre de 54 años y una joven de 20, quienes serían padre y novia de un joven que estaba detenido por una causa de «supuesto robo con arma con la participación de un menor”. Ante esta situación, y como es de práctica, los uniformados inspeccionaron los alimentos antes de ser entregados al detenido, con el fin de comprobar que no contuvieran ninguna sustancia extraña.
El llavero de la comisaria comenzó a revisar los recipientes y encontró envuelto en papel higiénico un trozo de sustancia vegetal de color verde amarronada con el olor característico de la marihuana y, además, cinco pastillas de color blancas.
Por ello solicitaron la presencia de personal de Drogas Peligrosas, quienes realizaron la prueba de campo, comprobando que la sustancia hallada era cannabis sativa, con un peso de 4 gramos, por lo que el ciudadano de 54 años fue demorado en primera instancia.
En ese momento, el detenido se alteró, golpeando las celdas y amenazando con prender fuego las celdas si su padre resultaba detenido, motivando a los demás internos a iniciar un desorden, sumándose varios de ellos.
Ante esta situación, los efectivos intentaban calmar a los detenidos para que desistan de su actitud, a la vez que solicitaban la presencia de refuerzos, entre otros del Cuerpo Operaciones Especiales y de la División Bomberos, estos últimos de manera preventiva.
Pero los internos hicieron caso omiso a las advertencias policiales y colocaron un colchón en la reja del acceso a la celda, rompieron los focos dejando en oscuridad el lugar y prendieron fuego el colchón, que pudo ser apagado con un matafuego.
Ante esto, personal del COE tuvo que abrir las celdas mientras los detenidos le arrojaban agua y aceite caliente, lanzando golpes de puño y patadas, por lo que tuvieron que hacer uso de la fuerza, controlando la situación y reduciendo a la totalidad de los detenidos.
A raíz del procedimiento, cuatro empleados del COE resultaron lesionados y tuvieron que ser trasladados hasta el hospital local para ser asistidos por los médicos, quienes diagnosticaron que presentaban golpes en varias partes del cuerpo, aunque ninguno revestía gravedad.
Por su parte, tres de los detenidos, entre ellos el joven que había iniciado el motín, fueron trasladados primeramente hasta la División Medicina Legal y luego dos de ellos fueron alojados en la Comisaría Octava Resistencia. En tanto el joven que comenzó el desorden cuando era trasladado hasta el Centro de Detención Transitoria, logró romper la luneta trasera del móvil que lo trasladaba. Por todo esto se iniciaron actuaciones judiciales por «supuesto incendio, daños a los bienes del Estado, atentado, resistencia contra la autoridad y Llesiones”.