CARBÓN BLANCO: AMENAZARON DE MUERTE A LOS FISCALES CARLOS AMAD Y FEDERICO CARNIEL
Fue a través de una nota pegada en el parabrisas del auto del primero de ellos. La amenaza intenta condicionar la actuación de los funcionarios judiciales en el proceso de juicio oral que se está desarrollando en Resistencia en la causa que se investiga el traslado de importantes cargas de cocaína de nuestra provincia a Europa disimuladas en bolsas de carbón vegetal.
Cuando parecía que la noticia en el día de ayer en el juicio oral que se lleva a cabo por la causa denominada Carbón Blanco pasaba por la declaración de los primeros testigos, sobre la medianoche de ayer se conoció que los miembros del Ministerio Público Fiscal que intervienen Federico Carniel y Carlos Amad, fueron amenazados de muerte.
Al término de la jornada fue Amad quien encontró adosado al parabrisas de su automóvil un papel donde condicionaban la actuación de los fiscales en este juicio, so pena de tomar represalias contra la integridad física de ambos e inclusive contra la de sus familiares.
Los funcionarios de manera inmediata radicaron la denuncia ante la Policía Federal, tomando intervención la justicia del mismo fuero, proveyendo la fuerza nacional de una custodia especial para ambos, y para sus familiares, teniendo en cuenta que en esta misma causa a través de escuchas se pudo conocer de amenazas proferidas por uno de los principales imputados, el abogado Carlos Salvatore, contra la jueza federal de Presidencia Roque Sáenz Peña, Zunilda Niremperger.
«Yo los voy a sacar, después la mato a ella, pero primero los saco a ustedes (…) No me importa, no me importa, yo pago este homicidio, lo pago a este homicidio, pero ella se muere», le había dicho por teléfono el abogado Carlos Salvatore a su esposa. La Policía lo estaba escuchando y allanó su casa de urgencia, convencidos que planeaba mandar a matar a la jueza que lo tiene procesado en esta megacausa de narcotráfico.
Con este antecedente tan cercano, sólo tres meses atrás, también tomó intervención la Procuraduría General de la Nación, a cargo de Alejandra Gils Carbó, interiorizándose del tema rápidamente y aportando todo lo que está a su alcance para garantizar el libre trabajo de los fiscales y la prosecución del juicio oral que se sustancia en la capital chaqueña.
La facilidad para acceder al auto de Amad, y el conocimiento de los movimientos tanto de él como de Carniel, ponen en evidencia la existencia de una importante red de narcotraficantes dispuestos a utilizar cualquier medio para lograr su cometido.